mario benedetti

Mario Benedetti (Si Dios fuera mujer)

domingo, 18 de enero de 2009

Novísima poesía ecuatoriana: simulacro de tantas realidades


Por Freddy Ayala Plazarte





“El mundo sólo existe gracias a esta ilusión definitiva
que es la del juego de las apariencias”

Jean Baudrillard


Es importante referirme en este tópico al simulacro que vivimos llamado “realidad”, me refiero al juego de apariencias que percibimos de cada fenómeno, todo el sistema está estructurado para que los individuos actúen, ahora la cuestión es que mientras más tecnología, consumismo, distracción y entretenimiento –factores propios de la ciudad –existan menor tiempo para ocuparse del otium (ocio).

El hombre actual es un ente espectador-actor de la realidad, que vive y se convence de una constante anamorfosis, los medios de comunicación reproducen surrealismo, anamorfosis (transposición de imágenes), que nada tienen que ver con lo cotidiano de las personas, de cierta manera desarticula el sentido creativo que poseen los seres humanos; ya todo está pensado no hay que preocuparse por nada.

Estamos ante un tiempo donde la identidad es lo que más se contrasta, lo uno es idéntico a lo otro, al mismo tiempo lo uno no quiere ser idéntico así mismo, en esta premisa podemos darnos cuenta cómo se puede dar una mezcla de sentidos, la autenticidad es un término para el limbo. Juego de apariencias en cada individuo, porque somos uno cuando estamos con alguien, otros en casa, otros en una ceremonia, otros escribiendo, incluso leyendo, es decir, no podemos estar conformes en una máscara, los estados de ánimo son variables como la realidad externa misma.

En esta paradoja de las apariencias es donde se canalizan las ideas del escritor actual, y quizá el lenguaje regule y manifieste el sincretismo de la realidad que percibimos. La poesía como un simulacro de la realidad se vale de las metáforas, hipérboles, y otras figuras literarias para manifestarse mediante símbolos e imágenes.

Baudrillard dice que el crimen nunca es perfecto, y que el artista es quien está mas cerca del crimen perfecto, que es no decir nada, porque precisamente como lo agrega Michaux su obra pretende no dejar huellas, ocultándose detrás de las apariencias. “Si no existieran las apariencias, el mundo sería un crimen perfecto, es decir, sin criminal, sin víctima y sin móvil”1.

Muchos no adeptos a la lectura cuestionan la imaginación de los autores; tanto de poesía como de relatos, por ser ilusorios y no estar en lo que ellos aciertan como realidad, a esto sumamos la ilusión en la que la superestructura llamada “ciudad” nos engloba, lo que aquí reflexionamos es que la palabra tiene un poder de construir escenarios excéntricos, que parten de la misma realidad concreta, lo que por el contrario los “realistas” no avanzan mas allá de lo que se les muestra.

El simulacro de la novísima poesía ecuatoriana/ premonición a las puertas es un acercamiento a la misma nada si la queremos asimilar desde Sartre, pero este simulacro de la novísima involucra otros elementos, que anteriormente ya mencionamos, influenciados por la contemporaneidad, huir de una realidad a otra, deformar un escenario hacia otro, enmascarar una escena cotidiana, en consecuencia; si la imagen poética se acerca al muro de la nada mucho peor el ilusionismo de la imagen virtual. Diferenciemos que una imagen virtual y una imagen artística poseen simbolismos ilusorios, si veo en un cuadro un paisaje de Claude Monet, mi pulsión, mi percepción, instinto me llevará a buscar un punto de vista inconsciente, como también si veo un cuadro de René Magritte, Ernst, mi pulsión me llevará a buscar el punto de vista consciente.
Otro vector fundamental que topamos a propósito del simulacro de la realidad, que delicadamente fue estudiado por los psicoanalistas casi un siglo es el sueño. ¿En que medida podemos asimilar a la imagen poética actual asociando a este factor?, ciertamente el sueño es un vector trascendente en la imagen poética actual, si el mundo contemporáneo satura sus imágenes comerciales, virtuales, mercantiles, entonces, el escritor actual recurre al mundo onírico como un síntoma de desahogo y desapego a lo establecido.
El sueño sigue y seguirá vigente, sobre todo en la imagen artística, no obstante, Milan Kundera decía que el sueño es una de las primeras necesidades del ser humano, a pesar de que él cuestionaba al siglo de la II postguerra como un constante campo de concentración donde no existe privacidad. Si aceptamos esta afirmación del escritor checo, entonces, escribir hoy en día es todo un desafío, voluntad, pulsión, creencia, inconformismo, cualquier contacto externo-interno nos motiva a escribir y expresar desde una particular cosmovisión.
Lo importante en este libro es resaltar la labor de cada autor y de todos los que se empecinan por la palabra día a día, si la misma realidad es imposible debido al acelerado trajinar de los hechos, la frase más conocida en una esquina es; “no tengo tiempo”, afortunadamente tenemos adeptos para desmitificar este tipo de afirmaciones.

1.-BAUDRILLARD, Jean, “El crimen perfecto”, pgs 11.
*Tomado de: Antología de la novísima poesía ecuatoriana (autores nacidos a partir del año 1979) "Premonición a las puertas” CAP. III
Ponencia leída durante el I Festival de Poesía Joven "Ileana Espinel 2008"